Una casona de antaño que perteneció al capellán del Santuario del Señor de la Misericordia, aposenta hoy una interesante colección de tiempos idos, en armoniosa convivencia de las terracotas indígenas, las imágenes sagradas del México Criollo y las reproducciones fotográficas de los cuadros enigmáticos de Martín Ramírez , “El Van Gogh Mexicano”, un tepatitlense, cuyos cuadros figuran en los grandes museos del mundo.